Para Reflexionar en nuestro ambiente Hoy (Laboral, familiar, sentimental, amistad, etc.)

Los celos, el ansia de éxito y el amor de los demás en exclusiva, están en el origen de los vínculos dañinos. Hay seres tóxicos capaces de infectarnos con su negatividad, pero también antídotos y técnicas para librarse de quienes nos amargan la vida e impiden crecer. Hay personas en nuestro entorno familiar, laboral o social, cuyos comentarios y actitudes nos complican la existencia.

Gente peligrosa para nuestra salud mental, emocional y física, a quienes conviene mantener alejados, o al menos a raya, si no tenemos más remedio que convivir o coincidir con esas personas tóxicas. Cualquiera que nos aflige con su actitud hacia nosotros, que no nos deja crecer, que no se muestra contento con nuestros éxitos y que pone barreras a nuestros esfuerzos para ser más felices, puede considerarse una persona tóxica para nuestra vida, aunque para cualquier otro individuo pueda resultar inofensiva.

No dejes de pedir al Espíritu Santo el don de del discernimiento para poder identificar estas personas y cuando las descubras:
  1. ALÉJATE DE ELLAS
  2. ALÉJALAS DE TU VIDA, DE TUS SERES QUERIDOS, DE TUS COSAS.

Que tenga un día iluminado por el Señor. Amén.

P. Jorge Domínguez S. C.